Carmen Laffón, considerada una de las más destacadas representantes de la figuración española contemporánea, murió la madrugada de este domingo a los 87 años.
Nacida en Sevilla, España, sobresalió por sus delicados y luminosos lienzos así como esculturas enfocadas en el retrato, paisaje y bodegón.
Talentosa desde pequeña fue influenciada por la obra de Marc Chagall, tras vivir en París e Italia hasta trasformar el entorno cotidiano en escenas serenas.
Laffón, ingresó desde los 15 años a la Escuela de Bellas Artes de Sevilla y posteriormente recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas otorgado por el Ministerio de Cultura (1982).
Fiel a su técnica y visión del mundo, logró su primer gran exposición en 1992, en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, donde se mostró su trayectoria desde los años 60.
La nostalgia, sus eternos paisajes y bodegones, también le valieron ser miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid y recibir el premio Tomás Francisco Prieto de la Fundación casa de la Moneda.
Entre sus últimos y más fascinantes trabajos se encuentra La sal, miradas a las salinas de Sanlúcar de Barrameda desde un estilo suelto y libre.
La línea del horizonte fue su eje, logrando paisajes hipnotizantes donde la luz y el color brindan una infinita riqueza de matices y texturas, que te invitan a recorrer detalladamente cada lienzo.
Su obra permanece en colecciones públicas como el Banco de España Madrid, Sabadell Bank, Banco Sabadell, Biblioteca del Museo de Arte Abstracto de Cuenca, British Museum de Londres, Caja Madrid, Colección de Arte del Siglo XX, Casa Museo de la Asegurada en Alicante, Fundación arte AENA, Fundación Banco de Santander, Fundación BBVA, Fundación Caja de Ávila, Fundación Caja de Burgos, Fundación Caja de la Moneda Madrid, Fundación Helga de Alvear, Fundación Juan March, Metropolitan Museum of Art, Nueva York, Museo de Arte Reina Sofía de Madrid y el Museo de Cáceres.