Sarah Goodridge (1788 – 1853) fue una artista estadounidense “miniaturista”, o especialista en retratos en miniatura.
El miniaturismo es una disciplina complicada porque exige extrema concentración y destreza.
Sarah empezó a dibujar desde niña mostrando aptitudes para el arte. Fue una artista autodidacta porque las oportunidades para formarse eran limitadas en su natal Templeton (Massachusetts, Estados Unidos).
Comenzó rayando con un alfiler la corteza de un árbol, y leyendo libros de arte y dibujo que intentó aprender por sí misma
Hasta los 32 años tomó clases de pintura con el miniaturista Elkanah Tisdale cuando se mudó a Boston con su hermana Elizabeth, y comenzó a destacar con su técnica.
La artista hizo trazos en acuarela sobre láminas de cartón, madera o marfil, para después enmarcarlos, o engarzarlos en broches y camafeos (relieves de piedras).
En 1820 inauguró su estudio y perfeccionó su técnica con el retratista y pintor Gilbert Stuart, lo cual le permitió darse a conocer con sus obras.
¿Por qué eran tan especiales los guardapelos con retratos en miniaturas? Eran un recuerdo familiar o de una persona querida, desde una boda, un nacimiento, o inclusive un fallecimiento.
Por su pequeñez eran de fácil transportación porque cabían en los bolsillos, y la persona propietaria podía contemplar el retrato por horas, y en secreto.
En 1825 realizó su primer autorretrato con un estilo clásico y convencional. Se pinta de frente al espectador resaltando sus ojos almendrados y con una actitud discreta, con un peinado estilo griego. Se piensa que la pieza la hizo para promocionarse ante sus clientes.
Entre 1827 y 1835 exhibió sus miniaturas en la muestra anual del Ateneum de Boston.
Mantuvo una relación poco afortunada con el abogado y político Daniel Webster durante varios años.
En 1828 realiza “Belleza revelada”, un autorretrato donde plasmó sus propios senos en un acto de afirmación femenina y rebeldía.
Sus pinturas se exhibieron en la ciudad de Boston y en Washington DC.
En 1851 decidió retirarse del arte miniaturista cuando su vista comenzó a fallar. Falleció en 1853 a causa de un infarto.
