Exhiben la obra gráfica de Melecio Galván

06 de Enero de 2022 a las 08:58 hrs.

 

La obra de Melecio Galván merece ser reconocida y por eso en la Galería José María Velasco, ubicada en Tepito, lleva acabo la muestra Quimeras y pesadillas: Una aproximación a la obra de Melecio Galván.

Fue un hombre de trágico fin cuyos dibujos son muestra de capacidad expresiva y de un gran talento en ciernes.

Debido a esto, la retrospectiva, que estará abierta al público hasta el 27 de febrero, resulta sumamente interesante ya que muestra el implosivo y autoritario contexto en el que el artista desarrolló su trabajo en la década de los 70 y 80 en México.

Melecio Galván es considerado uno de los dibujantes mexicanos más importantes de todos los tiempos ya que en su obra podemos ver referencias de las gráficas alemanas y oriental, Art Nouveaucómic, dibujo clásico y algo de música.

 

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Desde pequeño, el mexiquense desarrolló un interés por el dibujo gracias a que creció rodeado de historietas como Memín Pinguín, Los Supermachos y El llanero solitario, en el seno de una familia campesina y obrera. 

Más tarde ingresó en la Academia de San Carlos en donde compartió clases con Arnulfo Aquino, Jorge Pérez Vega, Arturo Pastrana, Saúl Hernández, Rebeca Hidalgo, Eduardo Garduño, Crispín y Carlos Oceguera, junto a ellos formó el colectivo artístico Grupo 65.

 

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Por su origen y su historia familiar, Melecio Galván desarrolló una conciencia de clase que más tarde reafirmó ante la situación política y social que enfrentó México con la matanza del 2 de octubre de 1968 y que a raíz de este acontecimiento viajó a Estados Unidos. 

En California trabajó en la pizca y más tarde en San Francisco convivió con Los 7 de la raza, una comunidad chicana de activismo cultural, social y político y colaboró con ellos a través de la ilustración de gacetas, talleres y murales.

 

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Dicho viaje marcó un parteaguas tanto en su vida personal como en la profesional ya que, a partir de ese momento, se convirtió en una voz subalterna aguerrida, que usó magistralmente el manguillo y el estilógrafo con una fuerte carga de simbolismo delirante.

Con el paso de los años, Melecio Galván desarrolló una obra cargada de crítica política hasta su muerte en 1982, en un asesinato que generó un sinfín de preguntas, y que ahora vale la pena analizarla en esta extraordinaria muestra.

 

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