3 escándalos que han vivido los museos más importantes del mundo
Los museos más importantes del mundo son recintos idealizados y romantizados por diversas culturas. Son depósitos de objetos preciosos y sitios de descubrimiento y aprendizaje. Sin embargo, independientemente de sus nobles misiones, también son instituciones con algunas necesidades poco nobles. Sobre todo, lideradas o dirigidas por familias multimillonarias de las que el origen de su fortuna siempre ha sido cuestionada.
Y es que la necesidad del dinero juega papel oscuros y ensombrecidos. Desde las –en ocasiones- absurdas millonarias subastas, hasta la curaduría de exposiciones temporales y permanentes.
Especialmente en Estados Unidos, la financiación gubernamental de las artes está bajo mucha presión. Y es que muchos museos dependen en gran medida de las donaciones de corporaciones y personas de alto patrimonio.
Por su generosidad significativa, este último grupo puede recibir agradecimientos en forma de una membresía de la junta. Y, cuando se convierten en fideicomisarios, los donantes disfrutan de oportunidades. Por ejemplo, participar en los procesos de toma de decisiones (como determinar presupuestos). Además, votan sobre la contratación y el despido y planifican eventos de recaudación de fondos.
Incluso, la mayoría de las ocasiones, el público desprecia a un fideicomisario, o la relación entre un museo y sus clientes. Las quejas generalmente son por negocios turbios, tratamiento preferencial a ciertas colecciones y los intereses de los fideicomisarios. A continuación, te hablamos de tres escándalos en los museos más importantes del mundo.
Gas lacrimógeno roseado a personas migrantes
La relación entre el Whitney Museum of American Art con la empresa de equipos de defensa Safariland, es controversial.
Y es que en 2012, Warren B. Kanders (vicepresidente de la junta del museo) compró la compañía Safariland. El escándalo de este recinto, considerado uno de los museos más grandes del mundo, se remonta apenas al 2018. Y es que Safariland produjo los botes de gas lacrimógeno utilizados contra personas migrantes en la frontera entre México y Estados Unidos en octubre de 2018.
Por ende, diversas publicaciones, activistas y artistas, han pedido al museo que replantee el papel de Kanders en la institución artística. Y de ser posible, prescindir de su presencia. Sin embargo, aún no se ha logrado esto.
Financiación contra el cambio climático
Sin duda, Museo Americano de Historia Natural es uno de los museos más importantes del mundo. Y como muchos de ellos, guarda conexiones sospechosas de toda ética y legalidad.
En 2018, un chico se manifestó afuera de las instalaciones con una pancarta que decía: “Saca a Rebekah Mercer de nuestro Museo”. Además del texto, el letrero mostraba la cara de Mercer en un esqueleto de dinosaurio. Pero, ¿por que?. Esto se debe a los puntos de vista “prehistóricos” de Mercer sobre la ciencia y el cambio climático. Sus palabras han sido duramente criticados por ambientalistas, sobre todo.
Según las estimaciones de BuzzFeed, en 2016, Mercer y su familia donaron casi 4 millones de dólares a grupos anti-científicos. Se trata de colectivos que buscan desmentir el cambio climático.
¿Impulso de opioides?
En 2017, el periodista Patrick Radden Keefe del New Yorker abrió un debate mundial. Y es que una de sus investigaciones expuso un dato relevante sobre los hermanos Sackler. Esto, porque en 1952, Arthur, Raymond y Mortimer Sacklercompraron la compañía farmacéutica ahora conocida como Purdue Pharma.
El escándalo se debe al lanzamiento en 1995 del analgésico OxyContin. Este medicamento, se cree que posee una adicción muy fuerte. Pero ¿Cuál es el problema o la conexión con algún museo? Es simple, varios miembros de la familia Sackler pertenecen a las directrices de diversas galerías y museos más importantes del mundo.
Por ejemplo, Theresa Sackler está en el consejo del Victoria and Albert Museum. Mientras que Mortimer Sackler pasó casi 20 años en el consejo del Museo Solomon R. Guggenheim.
Sin embargo, apenas en marzo, los museos Tate y Guggenheim, anunciaron que ya no aceptarían dinero de la familia Sackler. Y la Galería Nacional de Retratos del Reino Unido llegó a un acuerdo con Sackler Trust para detener una subvención de 1 millón de euros.
Sin duda, los museos más importantes del mundo, además de ser bellos recintos, poseen también historias poco éticas y sumamente cuestionables.