Ángela Ruiz Robles y su invento precursor del ebook
En un pequeño y recóndito pueblo español, una mujer creó el ebook, revolucionario invento que transformaría para siempre nuestras lecturas.
Así es, aunque esta prodigiosa creación se le atribuye a Michael Hart, fue Ángela Ruiz Robles quien el 10 de abril de 1962 patentó su “enciclopedia mecánica”.
Pero, ¿qué sabemos de ella? Ángela nació el 28 de marzo de 1895 en la localidad leonesa de Villamanín, España.
Estudió en la Escuela de Magisterio de León donde en 1959 asumió el cargo de directora, que mantuvo hasta su jubilación.
Durante su vida como profesora, impartió clases de taquigrafía, mecanografía y contabilidad mercantil. Ángela también escribió 16 libros entre 1938 y 1946.
Dotada de una actitud inquieta y siempre observadora, Ángela sentaría las bases para el ebook.
Prolífica inventora
Fue justo en los salones de la escuela donde gestaría su gran invento. Siempre observadora de sus alumnos, Ángela se percató de la dificultad y el cansancio que le significaba a los estudiantes cargas varios libros.
Por ello, imaginó una forma de facilitarles su lectura. Sin embargo, varias creaciones antecederían al libro electrónico.
En 1944 realizó el proyecto del atlas científico-gramatical, para posteriormente, dar paso a la máquina taquimecanográfica. Todos sus inventos estuvieron involucrados entre sí, teniendo como eje la gramática, la sintaxis, morfología, ortografía y fonética.
Sería el 7 de diciembre de 1949 cuando patentaría la primera propuesta de enciclopedia mecánica. Posteriormente, en 1962 patentaría el prototipo de la misma. Este antecedente del ebook, lo construyó en el Parque de Artillería de Ferrol -La Coruña-. Su enciclopedia mecánica constaba de dos partes:
En la izquierda tenía una serie de abecedarios automáticos, en todos los idiomas. Mientras que en la parte superior de los abecedarios contenía una bobina con toda clase de dibujo lineal, y en la de la izquierda otra con dibujo de adorno y figura.
En la parte inferior de los abecedarios, había un plástico para escribir o dibujar. Además, en la parte interior, podías encontrar un estuche para guardar asignaturas.
Por debajo de dichas asignaturas, había una lámina transparente e irrompible, que permitía aumentar el tamaño de las letras e iluminar los textos. Incluso, si cerrabas la enciclopedia quedaba del tamaño de un libro promedio. Perfecto para llevar a cualquier lugar.
A pesar de lo espectacular de su invento, no hubo ninguna empresa que quisiera comercializar su producto.
Ángela Ruiz Robles murió el 27 de octubre de 1975. Y aunque actualmente vivimos en la era digital, este libro mecánico de Ángela es el abuelo del ebook como lo conocemos.
Siempre resultará admirable e innovador que una mujer que vivió durante la España franquista y con situaciones poco favorables en un mundo reinado por hombres inventores fuera capaz de crear las bases de un grandioso avance tecnológico.
