Luigi Colani fue uno de los diseñadores industriales más importantes del siglo XX, pero también fue escultor, pintor, ingeniero, urbanista y técnico.
Con más de 4 mil bocetos, muchos de ellos una realidad y otros tantos que quedaron en papel se le considera un genio loco e innovador fuera de serie.
Fue autor de sillas, automóviles, aviones, instrumentos musicales, cámaras, incluso un televisor y espacios como oficinas, entre muchos otros proyectos.
Inspirado en la naturaleza se distinguió por las formas redondeadas y orgánicas. Para él no existían ni esquinas ni bordes.
Mi mundo es redondo.
El 'biodinámico' diseñador
Lutz Colani nació el 2 de agosto de 1928 en Berlín, Alemania, sus padres desde pequeño lo alentaron a realizar sus propios juguetes.
Estudió escultura y pintura en la Academia de las Artes de Berlín y para 1948 también tomó un curso sobre aerodinámica en La Sorbona de París.
Sus creaciones las definió como ‘biodinámicas’, lo cierto es que su estilo era inquietante y atrevido.
Sus diseños, por decir lo menos, eran poco convencionales. La crítica y público tenían una opinión dividida, había quienes lo odiaban y en la misma proporción, quienes lo amaban.
Lo cierto es que revolucionó el escenario imperante no solo en su país sino a nivel mundial.
Futurista, polémico y extravagante, en 1972 estableció su propio estudio en Harkotten Castle.
Falleció el 16 de septiembre de 2019, sus inusuales y revolucionarias obras quedaron como legado de una generación e inspiración para jóvenes creativos.
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