Las fascinantes máscaras hechas a mano de Damselfrau
Damselfrau experimenta con la confección de máscaras fascinantes hechas a mano.
Todo comenzó cuando llegó al mundo en Trondheim, Noruega dentro de una familia de artistas: su madre ilustradora y su padre un escultor.
En 2007 se mudó a Londres donde comenzó a crear y experimentar con la creación de disfraces.
Después trabajó en una tienda de antigüedades que la inspiró a concretar sus fascinantes e inusuales máscaras.
En ellas, Magnhild Kennedy, como se llama en realidad, resalta las texturas y lo más extravagante que encuentra a su paso.
Así, utiliza desde el encaje más fino, hasta piezas de cabello de geishas japonesas de 200 años.
Pero también cosas cotidianas y que se encuentra en la calle, como botones, bordados, telas y demás materiales.
Ella asegura que los “fantasmas" y los materiales la guían en su confección.
Con sus máscaras busca que el personaje se convierta en un juego, entre lo teatral y lo real.
