Con motivo del centenario de su nacimiento, que se celebrará el próximo año, la editorial Alfaguara decidió traducir al español y editar la primera novela que José Saramago publicó y llevó por nombre Terra do pecado.
Resulta que dicha historia, publicada hace más de 75 años en portugués, la concibió con el título de La viuda, pero para el editor de aquel momento este título no tenía gancho comercial así que decidió llamarla Tierra de pecado.
En aquel momento Saramago solo tenía 24 años y lo que buscaba era darse a conocer, así que aceptó este cambio y básicamente regaló su trabajo debido a que no firmó ningún contrato de regalías ni recibió retribución económica alguna.
Lo que resulta interesante es que muchas veces diferentes editoriales buscaron al Nobel para hacer una nueva edición de esta novela y hasta el final de sus días se negó a esto.
En dicho libro Saramago relata la vida de María Leonor, viuda y madre de dos hijos que se ve abrumada ante las dificultades para administrar su hacienda en el Alentejo.
Tras sufrir una profunda depresión por varios meses, María Leonor decide afrontar su responsabilidad como propietaria de las tierras, pero su corazón se siente conflictuado debido a que aunque está de duelo, su deseo por amar no se ha apagado.
La joven viuda pasa las noches en vela espiando los amores de sus criadas y padeciendo su soledad propia hasta que dos hombres, muy distintos, irrumpen en su vida y su destino cambia.
Todos los expertos en José Saramago, lo que incluye a su viuda y traductora, Pilar del Río, y al catedrático portugués Carlos Reis, considerado como máxima autoridad en la materia, coincidieron que era necesario publicar y traducir esa pieza temprana para contar con el acervo completo del que es uno de los escritores portugueses más grandes de la historia.
El libro fue publicado por primera vez por la Editorial Minerva Lisboa y no pasó absolutamente nada con él. Ni una reseña obtuvo, lo que hizo dudar a Saramago si se encontraba en el camino correcto o debía tomar otro.
Poco tiempo después escribió y publicó Claraboya y lo que encontró, un silencio y rechazo absoluto, hizo que no volviera a escribir por más de dos décadas.
Luego un José Saramago más maduro, ya entrado en años, empezó a publicar sus poemas, sus crónicas periodísticas y sus novelas, que años después lo convirtieron en uno de los premios Nobel más celebrados del siglo XX.
Así que ya sabes, si eres un ávido lector del Nobel portugués compra cuanto antes esta novela para que puedas ver cuánto evolucionó su escritura con el paso de los años.
