Eduardo Ramírez Villamizar: Rebelde y pionero de lo abstracto

Eduardo Ramírez Villamizar: Rebelde y pionero de lo abstracto

Eduardo Ramírez Villamizar es pionero del arte abstracto y minimalista,, con lo que ha puesto el nombre de su país en alto con su obra diversa.

Contribuyó al escenario latinoamericano, experimentó estilos y destacó en la pintura y escultura.

Al comienzo de su carrera su obra se abocó a los óleos y acuarelas.

Abordó la pintura figurativa y expresionista.

Así comenzó con lo abstracto que tendía a la geometría y después su trayectoria en escultura.

Otra de las tendencias a las que se acercó fue el universalismo constructivo.

Para 1970, llegaría su definición y madurez artística. 

Después de este periodo los encargos públicos y privados llegaron y con ellos, las obras monumentales.

El artista, al que se le denomina también como constructivo es uno de los más notables de su país. 

Más que un artista 

Nació el 27 de agosto de 1923 y fue el menor de 11 hijos.

En 1940, ingresó a la Universidad Nacional de Bogotá en la carrera de arquitectura, pero en 1944 decidió cambiarla por la de Arte y Decoración.

Tuvo la fortuna de poder viajar a sitios como París y Nueva York, de ahí su interés por las vanguardias.

Se codeó con los mismos Picasso o Brancusi.

Utilizaba básicamente los colores primarios o blanco y negro.

Entre los materiales más recurrentes en su obra están la madera, plástico, cartón, aluminio, acero o mármol.

El reconocimiento mundial lo acompañaría, así que las muestras no se hicieron esperar en Museos como Guggenheim o de Arte Moderno, en Estados Unidos.

Entre sus características se encuentran la síntesis y coherencia.

Falleció el 23 de agosto de 2004, en Bogotá.